* Las autoridades locales no tienen el contrato, la Auditoría Superior se los niega.
* 300 millones de pesos tirados a la basura
* 220 trabajadores en la incertidumbre
Por Gustavo Martínez Contreras
El relleno sanitario de Cancún será noticia de primera plana en las próximas semanas o días ya que no podrá seguir recibiendo la basura de los cancunenses, trabajadores que piden guardar el anonimato, se acercaron a quien esto escribe para denunciar una serie de anomalías que se dan en su centro de trabajo.
La Promotora Inmobiliaria Majahual, S.A. de C.V. ha tenido un comportamiento “sucio” en el manejo de los residuos sólidos, por más que el director de Solución Integral de Residuos Sólidos (SIRESOL), Manuel Ricárdez, halla salido en defensa de la empresa asegurando que se realiza un adecuado manejo.
Y es que, dicen los trabajadores, que tan mal están las cosas que ya “empezaron a despedir a los del turno vespertino”, todo por los malos manejos que ha realizado el gerente operativo, el ingeniero Javier Carrera, quien ha tenido una administración muy desaseada metiendo horas extras sin sustento, facturas falsas, refacciones fantasmas y un sinfín etcétera.
Cabe mencionar que también el regidor José Luis Acosta ha denunciado que el ayuntamiento ni siquiera cuenta con el contrato con la empresa Promotora Inmobiliaria Majahual, S.A. de C.V. y que se lo han negado en las instancias de gobierno competentes (Auditoría Superior) aduciendo que “no nos lo pueden enseñar”.
El viernes próximo autoridades municipales tienen una reunión con los representantes de la empresa, ahí, dijo el regidor Acosta, solicitará que le entreguen el contrato para poder estar enterados a qué están obligadas cada una de las partes, por lo pronto denunció que no se está cumpliendo con los lineamientos que ayuden a evitar la disminución de la vida útil de la actual celda, mucho menos para evitar filtración de los lixiviados.
Los trabajadores también acusaron que hay gran cantidad de escurrimiento de lixiviados en la explanada frontal ya que no están depositando los viajes en celda sino están sobre el suelo sin tener una geomembrana de contención.
En la larga plática con los trabajadores agregaron que no existen avances de algún plan emergente para librar la congestión ante el colapso de la actual celda sanitaria ya que está a punto de rebasar sus capacidades y aún no hay preparada la siguiente celda. Ante el colapso, no quedará otro destino para la basura que depositar en los montes aledaños contaminando de forma directa nuestros mantos acuíferos, junto con la flora y la fauna.
La planta está violando los estatutos de Protección Civil ya que no cuenta con tomas de agua hidrantes como lo marcan las normas de seguridad y no cuenta con certificación de planta segura.
Acusaron que tienen instalaciones de utilería, son mangueras sujetas a un tubo que está empotrado al concreto de forma aparente, haciéndole creer a los empleados que en caso de incendio cuentan con equipo y agua cuando no es así.
Por otro lado, acusaron que la empresa tiene alterada la báscula y no está certificada ante Profeco, robando al ciudadano particular al momento de disponer de forma final sus residuos
Por su parte, los trabajadores también hicieron énfasis en el tema de la durabilidad, explicaron que el promedio de vida de una celda en el antiguo basurero, el de Villas Otoch, era de 4.5 años, en tanto ahora es de máximo un año o año y medio, denunciaron que no están compactando bien el “pastel” por lo que al momento que entran los camiones cargados, éste se derrumba.
Agregaron que Promotora Inmobiliaria Majahual, S.A. de C.V., ligada a la empresa multimedios Grupo Sipse, incumple con su parte de separar la basura, pese a que en agosto de 2015 se inauguró la planta de separación de residuos sólidos Cancún-Isla Mujeres, misma en la que se invirtieron más de 300 millones de pesos, dinero literalmente tirado a la basura.
Los empleados trabajan con los recursos limitados en cuestión de equipo se protección personal y están en contacto directo con materiales descompuestos, RPBI y químicos. No se les proporciona guantes adecuados, uniformes, mangas, etc., por eso mismo tienen en el IMSS reporte de alto riesgo de trabajo.
Por lo que el Ing. Javier Carrera Contreras los amenaza para que no acudan al IMSS y vayan a Farmacias Similares, y ellos según darán cierta ayuda de gastos con tal de evadir la responsabilidad social con los empleados.
Cabe recordar que apenas en julio pasado, la alcaldesa Mara Lezama, aseguró que el relleno era funcional, ¿qué más puede decir si es sobrina del dueño? Hay que informarle que el inspector por parte del ayuntamiento, Sr Francisco Arias, funge como cobratario de los directores Oscar y David, al exigir una cuota mensual a la comunidad de familias pepenadoras que acuden al relleno sanitario a ganarse el pan de cada día, y sin escrúpulo alguno, se les exige un moche de 3 mil pesos mensuales para poder expender su pepena a la puerta del relleno, de lo contrario, no se les permite el acceso.
Uno de los asuntos más delicados es el cobro de recursos federales dispuestos al rubro del manejo de la basura de los cancunenses, alterando de manera perversa y cruel los números, alterando los promedios y de esta manera, robar gran parte del erario, el cual es dividido entre los directores de SIRESOL y Servicios Integrales Carrera, S.A., propiedad del Ing. Javier Carrera, que intenta figurar como benévolo poniéndose una etiqueta de activista ambiental, cuando es verdaderamente promotor de corrupción y enriquecimiento ilícito.
Por lo pronto hay 220 trabajadores que viven el día a día con la incertidumbre de perder su fuente de trabajo, mientras el ingeniero Javier Carrera (dueño de volquetes y maquinaria), les hace la vida imposible para que renuncien.
