MÉRIDA, MX.- El proyecto del Tren Maya ha ocasionado división entre ejidatarios de algunos pueblos de la Península de Yucatán, tal es el caso de los habitantes de Halachó en territorio yucateco, pues hay quienes aceptan todas las condiciones que propone el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) y hay otro grupo que pide mayor transparencia en el proceso.
De acuerdo con el Comité de Lucha, conformado por ejidatarios que si bien afirman no oponerse al proyecto en su totalidad, sí piden mayor claridad en el proceso de la venta de tierras que formarán parte de la ruta del Tren Maya.
En este sentido, en una reunión que se llevó a cabo el pasado domingo en la que estuvieron presentes tanto representantes de Fonatur como del despacho que está encargado del proceso de la compra-venta de los terrenos, se trataron temas de los que no están totalmente enteradas las personas que habitan en la comunidad.
En la reunión estuvieron presentes alrededor de 50 personas, cuando en Halachó hay más de mil 800 ejidatarios y son estos quienes denuncian que no están enterados de todo el proceso que se lleva a cabo en torno al proyecto insignia del presidente Andrés Manuel López Obrador.
A pesar de que Fonatur ha informado en diversas ocasiones que fueron realizadas las consultas correspondientes para que el proyecto del Tren Maya fuese aprobado, ejidatarios de la zona denuncian que no hay conocimiento profundo de parte de todas las personas que hoy habitan en la ruta aledaña que ha sido definida para el tren.
Asimismo, piden que haya participación de la Procuraduría Agraria de Yucatán, pues actualmente no ha estado involucrada en la toma de decisiones.
Los ejidatarios de esta zona de Yucatán piden que el Gobierno Federal retome reuniones para brindar mayores informes, además que el precio relacionado con la compra de los terrenos ha variado de un sitio a otro, pues en algunos casos saben que ofrecen más de 20 millones de pesos cuando a ellos por sus tierras les ofrecen cuatro millones de pesos, situación que consideran injusta.
