CHETUMAL, Quintana Roo, 2 de junio.- Comerciantes los mercados “Ignacio Manuel Altamirano”, “Lázaro Cárdenas del Río”, “Andrés Quintana Roo” y “5 de Abril”, de Chetumal se manifestaron en contra de que la alcaldesa de Morena Yensunni Martínez elimine las concesiones y les cobre rentas mensuales por el uso de los locales.
Los agraviados se pronunciaron en contra de la “Ley Yensunni” establecida en el 149 de la Ley de Hacienda del Municipio de Othón P. Blanco que impone el pago:
1.- De una RENTA MENSUAL por el uso de los locales
2.- El cobro en UMAS (Unidad de Medida y Actualización)
3.- Por metro cuadrado
Los manifestantes acudieron a los bajos del palacio municipal, donde señalaron que la alcaldesa de Morena, pretende hacer efectivo ese cobro a pesar de que cuenta con una concesión desde hace 47 años, y “no son arredatarios”.
“No somos arrendatarios, si no concesionarios, una figura jurídica que venimos ostentando desde hace más de 47 años, y que, con esa figura, con nuestro trabajo, aportación económica de forma directa de cada uno de nosotros, y el apoyo de nuestras autoridades; hemos venido mejorando los locales y nuestros mercados”, reprocharon.
Calificaron como un cambio erróneo en la figura de renta en lugar de derechos, en la Ley de Hacienda pues, “provoca que nuestros derechos y nuestro patrimonio se vea severamente vulnerado, porque de aceptar esa figura jurídica estaríamos aceptando que nuestro patrimonio termine al concluir el contrato de arrendamiento”.
Precisaron que el cobro en UMAS y por metro cuadrado representa en términos generales un incremento de prácticamente un mil por ciento con relación al pago por derecho de piso que actualmente paga, más los servicios de recoja de basura, lo que se duplica y triplica considerando que se trata de dos o más locales unidos en un solo negocio.
Los inconformes destacaron que no están en contra del pago de impuesto, pero un incremento del cobro de mil por ciento, no es juntos, sobre todo por la crisis económica de todos, conocida.
Por último señalaron que existen personas con intereses “personales” detrás de dicha ley, a través de la cual “funcionarios municipales pretenden adueñarse de nuestros locales, con el argumento de aplicar la ley, una ley que viene viciada desde su origen”.
