Ribera del Río Hondo, Quintana Roo.
La violencia alcanzó uno de sus picos más brutales en el sur del estado. El presidente de la Unión Local de Productores de Caña de Azúcar (ULPCA), Evaristo Gómez Díaz, fue hallado ejecutado junto a sus dos escoltas en un cañaveral cercano al cementerio de Sacxán.
Los cuerpos fueron descubiertos la tarde del domingo por un jornalero que caminaba por una brecha. Al notar tres “bultos” entre los surcos, se acercó y quedó horrorizado al ver los cadáveres. De inmediato alertó a las autoridades.
Los tres cuerpos presentaban múltiples impactos de bala y signos claros de tortura, confirmaron fuentes extraoficiales. Las víctimas habían sido privadas de su libertad días antes, pero su paradero era desconocido hasta ahora.
Evaristo Gómez Díaz ya había sobrevivido a un secuestro e intento de asesinato. En febrero de 2022, un comando armado lo interceptó junto al líder ganadero Sergio Crisanto Mortero en la carretera Juan Sarabia–Ucum. Mientras Mortero y el chofer fueron liberados rápidamente, Gómez Díaz apareció horas después golpeado y torturado. Su familia, temerosa, nunca presentó denuncia.
El 6 de octubre del año pasado fue atacado nuevamente a balazos al salir de una iglesia en Carlos A. Madrazo. Herido en el brazo, condujo sangrando hasta Chetumal, donde fue auxiliado por policías en el C-4. A partir de entonces, la SSC y la FGE le asignaron escoltas.
A pesar de estas medidas, este fin de semana los criminales lograron consumar lo que ya parecía una sentencia anunciada.
La escena del crimen permanece acordonada, mientras peritos en criminalística y personal del Semefo levantan evidencias. Hasta el momento, ninguna autoridad ha emitido un pronunciamiento oficial.