Está pendiente la liberación del derecho de vía de 30 kilómetros para el proyecto del Tren Maya, lo que significa aproximadamente 2 por ciento de los mil 500 kilómetros que abarca el proyecto, señaló el presidente Andrés Manuel López Obrador en su conferencia de prensa mañanera de este martes.
Destacó que los principales opositores al proyecto del Tren Maya han sido empresarios inmobiliarios que pretendían especular con las tierras y compraron grandes extensiones; “a algunos les falló porque no va a pasar por allí, otros no quieren aceptar los avalúos y se amparan porque quieren hacer su agosto”.
“Como faltan pequeños trazos (creen que) nos van a chantajear y les vamos a dar todo el dinero que piden, porque antes no se recurría a la expropiación pública porque para el neoliberal era un sacrilegio… por encima del interés particular está el interés público”, manifestó el presidente.
Comparó el actuar de los empresarios inmobiliarios con los integrantes de los ejidos resaltando “la importancia de la moral en la gente humilde, la ambición al dinero trastorna, obnubila a la gente” y agradeció “de todo corazón” a las comunidades, los ejidos. No descartó que algunos de los críticos del proyecto sean de verdad ambientalistas que no tienen toda la información; pero, resaltó, otros son oportunistas y mercenarios a quienes les pagan por manifestarse.
A pregunta expresa, dijo que en el caso de Quintana Roo hay muchos empresarios que desde hace décadas acumularon grandes extensiones de tierra y en ellas hicieron diversos tipos de desarrollos violando en la mayoría de los casos las normas ecológicas valiéndose de contactos con los políticos en turno.
Calificó a los amparos como una estrategia para dilatar la construcción del tren, con la esperanza de que éstos no se resuelvan en este sexenio: “como les falta poco tiempo y estos juicios los hacen muy largos con tácticas dilatorias piensan que nos doblegaremos”.
Fuente: La Jornada Maya