Casi la mitad de los hospedajes tipo Airbnb en Quintana Roo podrían ser multados a partir del primer día de 2022, por operar sin regulación y no pagar el Impuesto al Hospedaje.
Esto, toda vez que el tiempo “de gracia” que les fue otorgado por la contingencia sanitaria ya concluyó, por lo que a partir de 2022 tendrán que darse alta ante el Servicio de Administración Tributaria del Estado de Quintana Roo (Satqroo) o de lo contrario, enfrentarán cuantiosas multas.
A casi cuatro años de la aprobación del cobro del Impuesto al Hospedaje a las rentas vacacionales que se ofertan a través de plataformas como Airbnb, casi la mitad sigue sin cumplir con esa obligación en Quintana Roo, una fuga de aproximadamente 15 millones de pesos mensuales.
Rodrigo Díaz Robledo, director del Servicio de Administración Tributaria del Estado de Quintana Roo, explicó que hasta el momento, alrededor de 24 mil unidades Airbnb cumplen con la obligación.
Aunque dijo no tener datos sobre cuántos alojamientos tipo Airbnb operan en los principales destinos del Caribe mexicano, las asociaciones hoteleras estiman que son más de 50 mil unidades.
El año pasado el Inegi identificó cerca de 45 mil.
Añadió que lo recibido por las unidades Airbnb está muy lejos de alcanzar los 205 millones de pesos que se recaudan cada mes por parte de los 120 mil cuartos de hotel “tradicional”.
Airbnb en Quintana Roo paga 625 pesos de impuesto por cada cuarto
Esto quiere decir que cada cuarto de hotel aporta mil 708 pesos por este gravamen, mientras que cada unidad Airbnb solo 625 pesos.
A pesar de lo anterior, el Satqroo considera “una mejoría” que la recaudación del Impuesto sobre el Hospedaje para alojamientos Airbnb aumentara 400% en el último trimestre de este año, comparado con el mismo periodo pero del año anterior, cuando se recaudaba menos de cuatro millones de pesos.
Díaz Robledo explicó que esto fue posible gracias a la reactivación de la industria turística, lo que ha permitido que 24 mil de estas unidades cumplan en tiempo y forma con el pago de este gravamen, equivalente a 3% sobre la facturación por noche de estadía.
Añadió que en 2018, cuando se firmó el convenio de colaboración entre Airbnb y el Satqroo, se recaudaban dos millones de pesos mensuales.
Para el 2019 se alcanzaron 12 millones. La pandemia del Covid-19 provocó que en el 2020 la cifra se reduzca de manera considerable.
El funcionario puntualizó que se continuará exhortando a los anfitriones de este tipo de alojamientos a que se regularicen.