Los inconformes exigen soluciones a problemas sociales y el cumplimiento de compromisos de gobierno.
La visita del presidente Andrés Manuel López Obrador, efectuada al centro y sur de Quintana Roo, transcurrió en medio de bloqueos y protestas para reclamar soluciones a problemas sociales y el cumplimiento de compromisos de gobierno.
Mientras el presidente ofrecía su tradicional conferencia mañanera en la base militar de la capital del estado, cinco grupos de manifestantes protestaban sobre la avenida Efraín Aguilar, a las afueras de la sede, para exigir soluciones a problemas de adeudos federales, temas médicos, laborales, en materia de derechos de la mujer, reducción de precios a las gasolinas y hasta asuntos legales.
En la valla metálica que se instaló en el perímetro de la 34a. Zona Militar, llegaron docentes, esperando reclamar personalmente al presidente un adeudo por 28 millones de pesos por concepto de salarios del Programa Escuelas de Tiempo Completo, correspondiente al período octubre-diciembre de 2020.
Vladimir Sosa Cantú, profesor de preescolar, explicó que simplemente no se les ha realizado el pago a mil 500 trabajadores del sector educativo de Quintana Roo, entre administrativos, coordinadoras de alimentos, asesores de inglés, música y artes.
También un total de 10 trabajadores de la primera línea de atención a personas enfermas de coronavirus se quedaron con las ganas de pedirle al mandatario que les renueve sus contratos, para pasar de eventuales a base y con ello tener mejores condiciones laborales.
De igual forma, mujeres integrantes de Marea Verde y la Red Feminista Quintanarroense exigieron un alto a las agresiones contra las mujeres que ocurren en la entidad, desde Chetumal hasta Cancún, principalmente los homicidios y feminicidios.
En tanto, familiares de Jacinto Kuc Chan, quien fue atropellado por un vehículo y lo dejó convaleciente en una cama, llegaron para pedir que se haga justicia y que se aplique las sanciones penales contra el responsable, que de hecho está relacionado con una ex funcionaria de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Otro grupo exigía que se cumpla la disminución en el precio de las gasolinas, que incluso alcanzan los 20 pesos en promedio el litro, totalmente contrario a lo que prometió el gobierno federal.
Sin embargo, todos los esfuerzos fueron en vano porque salió solo un “representante” que recogió las solicitudes por escrito y prometió que el presidente las revisará. Minutos después AMLO salió en una Suburban blanca, sin pararse a dialogar, con rumbo a Tihosuco, Felipe Carrillo Puerto.
Horas antes de que el mandatario dejara la capital del estado, a 85 kilómetros de distancia, sobre la carretera federal 307, al menos 100 ejidatarios de diversas localidades del municipio de Bacalar colocaban piedras y palos en ambos sentidos, a la altura de la desviación a Mérida, frenando el paso de más 500 vehículos.
El reclamo principal era que se les haga un avalúo justo de las tierras que les fueron expropiadas en 2013, porque consideran que 227 mil 958 pesos por hectárea es injusto. La demanda es que mínimo sea de unos 900 mil pesos por hectárea.
Cerca de las 11 de mañana, llegó hasta ese sitio, Andrés Manuel López Obrador, quien se comprometió a revisar el tema del pago de la indemnización. Después de ese diálogo, los inconformes decidieron retirar el bloqueo. Antes del arribo del presidente, había retenido al superdelegado Arturo Abreu.
La comitiva finalmente pudo continuar su camino hacia el municipio de Felipe Carrillo Puerto, donde más manifestantes lo esperaban en Tihosuco.