Intromisión estadounidense, complicaciones políticas, económicas y sociales, entre las afectaciones que se darían si el gobierno de EU declara a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas.
El anuncio del presidente Donald Trump de “designar” como terroristas a los cárteles del narcotráfico en México generaría complicaciones políticas, sociales, comerciales y económicas para el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, consideran expertos.
Este martes, Donald Trump anunció que podría designar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas y que lleva días trabajando en ello, aunque reconoció que no es un proceso fácil. El mandatario republicano dijo que ha ofrecido a su homólogo mexicano ayuda para combatir al narcotráfico, pero López Obrador no ha la aceptado.
El tema se puso sobre la mesa porque esta semana Bryan LeBarón, a nombre de su familia, pidió a través del portal de peticiones de la Casa Blanca que el gobierno de Estados Unidos declare a los grupos de narcotráfico de México como “Organizaciones Terroristas Extranjeras”.
El tema se puso sobre la mesa porque esta semana Bryan LeBarón, a nombre de su familia, pidió a través del portal de peticiones de la Casa Blanca que el gobierno de Estados Unidos declare a los grupos de narcotráfico de México como “Organizaciones Terroristas Extranjeras”.
Pero la petición para clasificar como terroristas a cárteles mexicanos ya se había puesto sobre la mesa desde marzo pasado en el Congreso de Estados Unidos.
Los republicanos Roy Chip y Mark Green presentaron una iniciativa para considerar al Cártel Jalisco Nueva Generación, el Cártel Noreste y a los Metros, como grupos terroristas, lo que los equipararía con organizaciones como Al Qaeda o Boko Haram.
Seis expertos consultados por Expansión Política reconocen que el anuncio de Trump tiene múltiples motivaciones, pero destacan que una medida de esta naturaleza debe ser aprobada otras autoridades estadounidenses y no sólo por el presidente Trump.
Carlos Bravo Regidor, analista político y coordinador del programa de periodismo en el CIDE, considera que la declaración tendría diversas implicaciones, entre ellas, en lo inmediato, dificultará la aprobación del T-MEC.
“Puede haber implicaciones en términos de cooperación con el gobierno mexicano, en términos de confiscación de bienes en Estados Unidos que se considere que están de alguna manera relacionados con dinero mal habido o con actividades de estos grupos, en fin. Hay un catálogo muy amplio de consecuencias de una declaración como ésta. Hay que ver cómo se procesa. Es muy pronto para poder aterrizarlo, de entrada, pone a México en una situación muy delicada y es una muy mala noticia porque desde luego que esto empuja en la dirección contraria a la que hubiera querido ir López Obrador respecto a la política de seguridad”, destaca.