Las familias desembolsan más dinero para instalar el altar.
Los altares para celebrar el Día de Muertos representan, por lo regular, una inversión de 300 pesos para las familias, pero para este año el desembolso será mayor ante el incremento y escasez de los insumos.
Como cada año, los negocios comienzan a vender todo lo relacionado con la tradición mexicana, en la que la gente acostumbra a adquirir las tradicionales calaveritas de dulce, veladoras, adornos y flores, que actualmente escasean y tienen un alto costo.
De acuerdo con comerciantes del mercado 23, uno de los puntos de mayor afluencia, los productos reportan un alza de dos y hasta 15 pesos, como es el caso de la flor de cempasúchil.
Úrsula, comerciante del inmueble, dijo que desde hace 20 años tiene un negocio para la venta de flores de temporada, y si bien la gente está comprando todos los productos, sí hay molestia por el aumento de precios, pues muchas personas ya tenían presupuestado el gasto.
“En el caso de la flor de cempasúchil, vemos que está escaso y más de lo normal, con un alza para nosotros de 30 pesos el rollo, que se trae desde Puebla, y es necesario hacer un ajuste. El ramito lo vendíamos en 25 pesos y ahora es 10 pesos más caro”, sostuvo.
Miguel Montejo, también comerciante, dijo que la mercancía comienza a llegar para que las familias puedan elaborar su ofrenda. Conforme se acerquen el 1 y 2 de noviembre ya incrementa la venta, sobre todo en el caso de las calaveritas de dulce y las flores, aunque otras personas adquieren otros caramelos.
También ya comienzan a comercializar el pan de muerto, el cual ahora se trae de Puebla para poder venderse de manera más económica, aunque también lo adquieren en algunos puntos de la Península de Yucatán, y que cuestan entre 15 hasta 150 pesos la pieza, dependiendo el tamaño.