Al estilo del formato de los eventos de la escuela obsoleta del chan-priismo, Manuel García Salas “el mano rata”, parecía que estaba en sus tiempos de campaña política, al fanfarronear de nueva cuenta con la sangre que lleva en las venas de su cuerpo priista, con todo el teatro que armó en la audiencia publica que se realizó en Puerto Morelos buscando como siempre los flashes de las cámaras y andar arrimándose al equipo oficial del gobierno para que “los poliboces” le tomen sus fotos para las redes sociales
CANCÚN, Quintana Roo._ Su arrogancia, cinismo y burla no lo podía ocultar con la falta de respeto que demostró a la gente humilde de los puertoleonenses con la pasarela de exhibicionismo que hacía, en la que intentó demostrar ser el elegido y el operador político en éste evento para el pueblo.
Era visible el nerviosismo del priista vestido de azul que se reflejaba en los labios cadavéricos agrietados y escamosos parecido a la boca de las mojarras preñadas o al boquinete, producto de su enfermedad esquizofrénica, su locura de la ambición del poder y el dinero, y su elevada necesidad de reconocimiento social.
Éste dia se demostró toda una estrategia al estilo priista de acaparar hasta lo imposible con las fichas anticipadas de la audiencia pública.
En resumen, quedó demostrado y evidenciado los y las personas que una noche antes habían planeado todo un acaparamiento de fichas para seguir pidiéndole al gobernador C.J., las mismas peticiones que van desde puestos políticos, patentes, placas y la larga lista a la que no tienen llenadera éstos “líderes” que se han hartado de vienes y riquezas en los sexenios pasados como priistas y hoy lo siguen haciendo con la gula de la ambición disfrazados de azul.
Eran los primeros en darse a conocer al pasar con el hambre de la ambición como que si el pastel se iría a extinguir. Claro, no podían faltar sin pasar a pedirle al gobernador con todo el cinismo y sin vergüenza, los y las que demostraban en campaña con ofenzas e injurias contra el que éste día les recibió con la mano abierta; ahí estaban los que como regidoras ganan exagerados sueldos en la presidencia por ser veletas, traidoras, y sin moral y ética religiosa, pidiendo más y más sin que les llene el baúl, ahí estaban los maridos, familiares,
madrinas, de los que han estado y siguen en el poder sin saciarse como en los viejos tiempos.
Según para ” el mano rata” fue todo un éxito el evento, cuando en realidad, para los analistas, políticos de altura del primer círculo, para la gente sencilla y común fue toda una burla, circo y fiesta de priistas resentidos, y los disfrazados de azul que se disputaban la bendición del número “uno”, sin pensar a conciencia que todo tendrá a su debido tiempo un costo político y la factura alguien la tiene que pagar.
“¡Tienen miedo!, nos los chingamos, son putitos, me tienen miedo, son pendejos” fueron las sabias palabras que vociferaba el “mano rata” a sus huele pedos, que lo seguían a donde se movía, mientras disparaba los tacos del cochiperro que servían a los invitados de la gran pasarela de los manolistas disfrazados de azul, donde las ofrendas de la disputa por el liderazgo del sindicato de taxistas, y las quejas de los “chilangos” de latitud 21, con sus quejas y solicitud de empleos buscaban un lugar protagónico en ésta fiesta, donde un ilusorio ignorante del manejo de estadísticas, hasta encuestas le entregó al manolete para ostentar su aceptación al 3×1, cuando en la realidad va en picada y en desventaja el eterno candidato “mano ratas”.
CGNoticias Agencia
