Los sellos de clausura a la obra que colocó la Profepa ya fueron retirados.
En marzo de 2021, el desarrollo Luximia Zen Garden, en Puerto Cancún, arrasó con por lo menos 100 metros lineales de manglares, palmas chit y demás vegetación, para dar vista al complejo hacia el bulevar Kukulcán.
El manglar fue sustituido por una línea de palmas chit de tamaño pequeño.
Tras el desmonte y relleno del manglar, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) colocó sellos de clausura a la obra, mismos que ya fueron retirados.
El manglar, especie protegida por la Norma Oficial Mexicana 059- Semarnat- 2010, fue derribado a ojos del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), pues fue esta dependencia la que autorizó modificaciones a la ciclovía del bulevar Kukulcán. Durante esos trabajos, aprovecharon para tirar la vegetación. Con anterioridad se desmontó y rellenó el terreno de la obra.
El proyecto Zen Garden se oferta como “una mezcla entre moderna y dinámica, con un gran entorno natural lleno de actividades y experiencias día a día”.
Los manglares son bosques inundados de amplia relevancia ambiental que se ubican en las zonas costeras tropicales y subtropicales; forman parte de un sistema ambiental que conecta el continente con el mar y, por tanto, están asociados con otros ecosistemas como las dunas, lagunas y el arrecife.
Las especies de manglar presentes en la zona (mangle rojo, blanco, negro y botoncillo) están protegidas por la Norma Oficial Mexicana 059-Semarnat-2010, por considerarse en peligro de extinción y de importancia ecológica prioritaria.
El Artículo 60 de la Ley General de Vida Silvestre prohíbe expresamente la remoción, relleno, trasplante, poda, o cualquier obra o actividad que afecte la integralidad del flujo hidrológico del manglar; del ecosistema y su zona de influencia.
Asimismo, el Código Penal Federal prevé en su artículo 420 Bis sanciones de hasta diez años de prisión a quien dañe, deseque o rellene humedales, manglares, lagunas, esteros o pantanos.